Me di cuenta de que fui feliz y no lo supe ver.
De que todo estuvo en su correcto lugar.
No lo pude apreciar.
Y lo perdí.
Perdí colores, gustos, sensaciones.
El cielo perdió calor.
Y la brisa perdió su olor.
Las risas no son las mismas.
Mis palabras juntas no hacen rimas.
Perdí tu compañía.
Y la felicidad del día a día.
Por lo menos me queda la memoria.
Que atesora todo el pasado, toda la gloria.
Si cierro los ojos aun puedo sentir
el camino de tu
presencia.
El perfume del pasado.
Todas y cada una de las esencias.
Que marcaron mi vida
Y eso es algo que no se olvida.
Por mucho que se sienta hoy tu ausencia.
Fui mil veces feliz, y hoy soy feliz de haberlo sabido.
De haberme dado cuenta, en algún momento de mi vida.
Y que no caiga todo en el olvido.
Como si en mi no hubiese habido.
Cosas tan bellas como las que hubo contigo.
La memoria puede revivir muchas cosas.
De las más tristes hasta las más hermosas.
Lo que no puede es cambiar el paso del tiempo y las decisiones.
Pero te da resguardo y nunca estarás solo.
En ella aun vive todo lo bueno que alguna vez sentiste.
Y el amor no caduca
Y los recuerdos no se vencen
Porque cosas tan hermosas te acompañan toda la vida
y son
las que nunca perecen.
Como enseñanzas, son consejos y sirven de guía.
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